El poeta es un fingidor.
Fernando Pessoa
Amada, que no te cobijen las tinieblas.
Yo canto a tus días
y en mí gritan los oscuros abismos.
Desde tu ausencia heme aquí,
errante en la casa.
Jamás vi crecer el trigo,
pero imaginé soles nacientes
sobre los campos dorados.
Finjo que me dueles, y me dueles.
“Y”, un texto de Rafael Vilches Proenza, poeta cubano,
perteneciente al libro Café amargo (Neo Club, Estados Unidos, 2014).